Si nada ni nadie lo remedia así se va a quedar la acuarela con la que me evadí el viernes por la tarde; y digo evadí porque puedo asegurarte que Murphy existe, estos días lo he visto dando toda la guerra que puede y jugando conmigo hasta llevarme como un dominguillo. Ciertamente todo es susceptible de empeorar: doy fé. Estoy empezando a tener el estudio como un refugio ante la avalancha de despropósitos que me van llegando. Joder que principio de año...¡y estamos en marzo!
Volviendo a temas más amables. Le estoy cogiendo gusto a esto de la nieve. No descarto hacer una buena serie de paisajes nevados como lo que estoy pintando últimamente y que me hacen sentir realmente cómodo. Además este año hay para dar y vender.
Acuarela en la que se ve, desde un poco más arriba de El Portalét, y mirando hacia España, el Pacino, Sierra Partacua, el Garmo, Pondiellos, los Infiernos y se adivinan tantos y tantos sitios que me han acompañado toda mi vida. A ver si encuentro (seguro) un marco esta semana y lo cuelgo en casa para hacer de recordatorio, aunque no sé si hace falta, de los miles de buenos momentos que estan pintados en este papel.
Schmincke y Arches, 41x31.